el juego del avión

Parece nada decir que te vas 5 meses, perola verdad es que desapareces casi medio año.
Tiempo en el que los demas van abanzando, y quiza tu te limitas a detenerte y esperar que todo siga donde tu lo dejaste...ahora toca adaptarse a los cambios, que creo que me estan ostando ams de lo que deberia...o tal vez lo diferente ahora soy yo, no se...
me canso, me aburro, y me siento extraña en mi casa, en mi territoria y en mi vida. Quiero gritar y enfadarme con las nuevas noticias, en como me als comentan, pero no me apetece. Y me siento incomoda, incomoda en la calle, en mi habitacion, en el taller, escribiedo, pintando... Solo me encuentro cuando oigo a veces su voz al otro lado del telefono y nos empezamos a reir a la par...Quiero frnarlo, y no puedo, es imposible, esa voz al otro lado de europa, algun dia desaparecerá, y ese momento, me da verdadero panico...

Wellcome

Las cosas no suelen ser como uno se las espera...
Con mi vuelta a España,me esperaba el ovido de algunos, y el abrazo de otros, y la realidad fué totalmente diferente.
Me volví a encontrar con ese hombre de quince años, con aspecto exterior de uno de 50, que es inamovible, y entendí porqué cuando huyo, acabo a su lado. Él, el mismo que me da tanto quebradero, es inamovible, se resiste a cambiar y a crecer,por mucho que cambie el medio, el permanece con su vida de adolescente.
Me he sorprendido a mi misma refujiandome en mi casa, sin ganas de salir, sin ganas de contar, sin explicar, agobiandome las preguntas de quien sabia donde estaba y venia a buscarme o me llamaba para confirmar que esaba donde ellos creían.
El abrazo que esperaba en algunas ocasiones no llegó, y la verdad, casi creo que ni me importó. Sabía que todo era diferente, o quizá demasiado parecido a lo que había a la hora de mi marcha, nada se detiene por mucho tiempo que tu te marches o por mucho que aparques algo.
La sorpresa vía telefono llegó al dia siguiente del aterrizaje en Barcelona. A sabiendas de que alguno me habria echado al olvido, mi movil empezó a sonar con un numero que mi movil o habia borrado o nunca habia registrado, al otro lado, y entre el sonido del bar, adiviné una vocecilla nerviosa...hola chiquita, como estas?

SO...GOOD LUCK...

Dia de despedidas...deberia de haberme acostumbrado a decir adios, despues de tanto ir de arriba a abajo, pero es algo a lo que no soy capaz de acostumbrarme. La gente llora, se emociona, da las gracias..., y yo, lejos de poder demostrar nada permanezco impavida sin hacer mueca alguna... Curiosamente la despedida que mas me duele es una telefónica, casi fria,-mucho mas fria que la anterior, en la que pensabamos que era él el que se iba- en la que los dos interlocutores permanecen mas tiempo en silencio que hablando:

-Ey! como estas?qué haces?
-Terminado la maleta, aunque la voy a deshacer porque no encuentro el maldito mp4.
-Eres genial!
-Genial por qué?por perderlo todo?
-... ... no, creo que genial por todo...
-Te noto nervioso, qué pasa?
-.... Nada, no me gustan las despedidas, es solo eso. Creo que estoy algo confundido.
-Cuál es e problema ahora? Creí que ya estabas mas estable...
-Si, bueno, no, quizá... Vendrás en vacaciones? ... (risa nerviosa)
-No lo sé. No quiero volver para no hacer nada, he visto casi todo, y bueno volver sola...
-Sola, no, conmigo, podría enseñarte más cosas... (de nuevo esa risilla que nunca deja nada claro)
-...
-...Si voy a verte, podré quedarme contigo?
-Claro, o con cualquiera de nosotros.
-Si bueno pero...
-...porqué estas nervioso?
-No me gusta decirte adiós.
-...
-Creo que vuelvo al trabajo, que tengas buena suerte en todo. (otra vez esa risa)
-Para ti tambien
-Gracias, adios.

la mentira de la verdad

No hay verdad que no esconda detras su pequeña trampa o mentira. Para que negarlo, cada cual tiene su version de los hechos y lleva su vida como mejor puede, no del todo como quiere.
No existe lo absouto, solo las cosas a medias.
Tras buscar a alguien lleno de sinceridad, me dí cuenta que buscaba algo imposible. Nadie puede afirmar al 100% nada; al menos puedo decir que poco a poco me he ido desprendiendo de las grandes hipocresías con sus correspondientes hipócritas que me he ido encontrando por el camino, no sin saber, que puede que mañana conozca a otro nuevo, que tardaré en descubrir.